Y sí, los que contamos con muchos años, no nos escandalizamos...hemos pasado, muchas,...no nos olvidamos...Claro que "lo de ahora" parece superar "al pasado", al menos el vivido por quien les habla. Uno diría que alcanza el grado "de demasiado". Toda vez que detrás de todo aparece, una y otra vez, el "fantasma" de la devaluación de la moneda. Ergo, no sabemos dónde estamos, qué terreno estamos pisando, qué ocurrirá en cortísimos plazos, e tc. et c. Ergo, "el refugio" (??) en moneda extranjera. Pero claro, cuando compramos el pan, la leche. la carne, la fruta y verduras, el pescado, artículos de tocador y de limpieza, etc. etc., lo seguimos haciendo en nuestra "devaluada" moneda ...lo cual implica una "contradicción" o "doble standard" que nada bien nos hace, le hace a nuestros cerebros, entre otras muchas "otras cosas". Todo ello en medio del insoportable calor, los cortes de luz, falta de